La serie sigue el día a día de la familia del inspector Paco Miranda, que es trasladado a la comisaría de San Antonio (ficticio barrio conflictivo de Madrid) junto a los subinspectores y amigos Mariano y Lucas. Los tres policías, que no son el arquetipo de unos profesionales competentes y que resolverán los casos de la manera más surealista posible, tendrán que adaptarse así a su nueva vida.

A su vez, Paco está casado con Lola y son padres de la adolescente Sara, la cual está enamorada de Lucas. Éste está divorciado de Silvia, cuñada de Paco y ahora compañera de trabajo, mientras que Mariano acaba de divorciarse también de su mujer y decide compartir piso con su joven compañero. Para más inri, el nuevo jefe de Paco y cía no es otro que su suegro: Don Lorenzo, un hombre que piensa que tanto su yerno como sus compañeros son poco más que inútiles.