La serie narra el convivir diario de una familia, compuesta por la pareja y sus tres hijos en una casa típica de Estados Unidos, de grandes dimensiones. El marido, Tim "herramientas Taylor" se dedicaba a un programa de televisión ("La hora de la Herramienta") donde desempeña pequeñas chapuzas junto a su colega de oficio Al Borland. Lo cierto es que a Tim le salían todos sus experimentos siempre mal, chapuza tras chapuza, y Al es quien realmente entendía más del oficio, salvándole en la medida de lo posibles.

Tim es el típico hombre al que le gustan las carreras y los deportes, la cerveza y la risa fácil, y su esposa maneja más la sensatez y el buen gusto. Sus hijos son una gamberrada tras otra, dentro del respeto lógico.

Todos los capítulos, en un tono humorístico muy fuerte, trataban cosas mundanas, problemas diarios de toda persona, con una moraleja final que llevaba a cabo hablando con un venico suyo tras una valla, un señor al que en ningún capítulo se le llega a ver el rostro.