Jill Parrish (Amanda Seyfried) regresa a su casa después de pasar la noche trabajando y descubre que su hermana ha sido raptada. Jill sospecha que el secuestrador de su hermana es el mismo que la atormentó a ella años atrás. Nadie cree a Jill por lo que deberá luchar por sí misma a contrarreloj para evitar que el misterioso asesino acabe con la vida de su hermana.